¡¡ Ya tenemos Kart !!

Hola a tod@s!

Pues bien, la noticia del día es que ¡Ya tenemos kart!.

Lo primero que hay que tener en cuenta una vez tomada la decisión de regalarle el kart al niño (en nuestro caso ha sido regalo de cumpleaños), es tener en cuentra el presupuesto que se tiene y las cosas que son totalmente necesarias para el kart. Lo que debemos comprar irremediablemente es:

Un Kart
Un carrito para trasladar el Kart
Un manómetro
Un cargador de baterías (si el kart utiliza arranque eléctrico)
Equipación para el niño (Mono, guantes, costillar, zapatos especiales, collarín y casco).
Llaves allen (son medidas standard, así que si tenemos en casa seguramente valdrán)
Alquiler de circuito y en caso necesario zona para guardar el kart.

Carrito: Muchos pensaréis ¿y para qué el carrito?, al menos eso es lo que yo pensaba, ¡inocente de mí! pues bien, el kart hay que moverlo y trasladarlo, no es conveniente que se haga por el suelo pero sobre todo, si el niño se da un golpe en la pista y es necesario llevarse el kart para ajustarlo, tenemos que hacerlo con el carrito, de otra manera el kart podría dañarse o romperse. Es indispensable. A nosotros nos lo regalaron con el kart, pero si no tenemos, comprarlo de segunda mano son 100 euros y nuevo unos 150 euros.

Manómetro: Sirve para medir la presión de los neumáticos y si, si, podemos gorrearle el manómetro a la gente que esté por el circuito, pero... no está bien ser unos gorrones, y cada vez que cojas el kart, aunque sea al día siguiente, hay que ajustarle la presión de las ruedas, con lo cual es indispensable también. Nosotros lo compramos nuevo a través de MilAnuncios por 39 euros.

Cargador de baterías: Si el kart lleva arranque eléctrico, la batería acabará gastándose, así que es también indispensable si queremos que el kart arranque siempre . Nosotros lo compramos nuevo a través de MilAnuncios por 19 euros.

Equipación:

    Casco para karting (vital) Entre 100-150 euros los más económicos

    Costillar (vital como el casco, ya que se protegerá la espalda del niño en caso de golpe), en el mercado venden costillares tipo chaleco que son flexibles y costillares rígidos, los chalecos cuestan entre 35-40 euros, los rígidos entre 75-80 euros, mucho mejor rígido.

    Collarín: Protección para el cuello, junto con el casco y el costillar son las más importantes. Su precio es de 35 euros.

    Mono: Si llevas ropa térmica en invierno y transpirante en verano es mucho más cómodo que la ropa de calle. No es tan necesario como las demás cosas. Su precio está entre los 90-120 euros.

    Guantes: Muy necesarios, ya que permiten agarrar mejor el volante y protegen las manos. Su precio está entre 25-35 euros.

    Calzado: A muchos os parecerá lo menos importante, pero no, tiene su sentido. Los zapatos para karting tienen una suela especial, antideslizante y muy muy fina, con lo que el tacto en los pedales es mucho mayor y no resbala, por lo que la conducción es más precisa.  El precio ronda los 50-70 euros.

Todo esto son precios que podemos conseguir para ropa homologada. Venden por ahí paquetes de todo el conjunto mucho más baratos, pero tenemos que tener en cuenta que en un futuro si el niño quiere ir a alguna competición regional (no hace falta que sea el campeonato de españa) y le compramos la "ropa barata" no servirá.  Es por ello que es fundamental antes de comprar nada decidir qué queremos realmente, si comprarle el kart para diversión sin más pretensiones o para que en un futuro si se le da bien, llevarlo a alguna competición.

Mi consejo, es que apunteis al chiquillo a algún curso de pilotaje, dónde regalen la equipación, ya que además de que el niño aprenderá a llevar karts de competición y aprenderá a pilotarlos, tendrá la equipación. En nuestro caso lo llevamos al programa de Tecnificación de Jóvenes Pilotos del Race, nos costó 400 euros y nos regalaron toda la equipación excepto las botas, el programa está co-financiado por la Comunidad de Madrid de ahí que el precio sea tan económico, podéis encontrar información en la web http://www.jarama.org/. El programa dura un mes aproximádamente y es totalmente aconsejable para los que queráis iniciar a los niños en el mundo del karting. El curso se debería hacer con 7-8 años, ya que cuanto antes empiecen mucho mejor.

Las llaves Allen nos permitirán desmontar parte del chasis y arreglar o apretar los tornillos que se puedan aflojar.

Ahora vamos a por la compra del Kart. 

Debemos tener en cuenta dos grandes cosas a la hora de tomar la decisión. La primera es para qué queremos el kart, ocio o competir y la segunda que la categoría Alevín es hasta los 11 años, por lo que al llegar a esa edad, tienes que comprarle un nuevo kart, así que si tu hijo tiene 10 años y le falta poco para los 11, mejor que te compres ya un kart de cadete.

Si queremos un kart para ocio, lo tenéis muy fácil, escoger un chasis decente (los top kart se ve que van bien) con un motor Comer 80, son fiables y perfectos para iniciación. Este tipo de kart no tendréis problema en conseguirlo, cualquier karting que tenga alojamiento tendrá este tipo de karts. Su precio no debería ser muy elevado, en el mercado de segunda mano se venden en buenas condiciones por 600-800 euros.

Nosotros en este aspecto nos encontramos un grave problema a la hora de comprarlo, y es que en Madrid es prácticamente imposible comprar un kart de competición de segunda mano que es lo que queríamos nosotros ¿el motivo? No tenemos ni idea, pero no hay. Suponemos que tiene que ver con que la comunidad de Madrid no hace campeonato de karting propiamente dicho y para categorías alevín, no hay.  Así que finalmente y tras mucho buscar, encontramos un kart en Málaga con un chasis Fernando Alonso (Tony Kart) y un motor Puma 65 preparado para competición. Ojo con estos karts, tienen que estar homologados y llevar sellado el chasis y el motor con la homologación FIA/CIK, de lo contrario no os valdrá, preguntad siempre por las homologaciones. En nuestro caso, la verdad que hemos tenido muuucha suerte, compramos el kart con el chasis del 2009 y el motor nuevo del 2010 por 1300 euros, todo gracias a que era un chiquillo de fuera al que sus padres le metieron en el karting, y tras dejarse todo lo que tenían en el kart y la competición, se volvían a su país para continuar allí, ya que aquí era insostenible (les cobraban 1500 euros por carrera y ya no podían seguir soportándolo). De los equipos y lo que cobran hablaremos en otra ocasión.

Pues bien, como el precio era buenísimo, decidimos arriesgarnos, así que alquilamos una furgoneta y el sábado nos fuimos para Málaga. Cuando llegamos, nos llevamos el kart a un circuito a que le dieran un ojo (nosotros no controlamos nada, nada de mecánica), y nos dijeron que tenía una pinta estupenda, así que lo pagamos y nos lo trajimos para Madrid. Si veis que hay una buena oferta de algún kart, preguntad, porque puede ser una buena oportunidad. Efectivamente siempre hay riesgos, pero a nosotros nos ha salido bien, estamos contentos y el motor va impresionantemente.

El domingo, con la misma furgoneta alquilada, nos llevamos ya el kart para el circuito. Montamos el chasis (alquilamos una Berlingo y tuvimos que desmontar parte del chasis para transportar el kart) y nuestro peque pudo probar por fin su kart. Tuvo un pequeño percance con la dirección, no estaba del todo alineada y los frenos iban algo duros, así que dejamos el kart en el mecánico del circuito para que le hiciera una puesta a punto. Tensó los frenos, alineó la dirección y puso todo en orden. Ayer nos llamó para decirnos que ya tenía el kartcito perfecto, así que el sábado, nos darán ya la jaula y podremos ver disfrutar a nuestro peque. Nos cobró por hacer todo al kart, ajustarlo, arreglar la dirección, soldarle un cablecito y ponerle unas tuerquecitas 65 euros (nos ha parecido muy barato).

En nuestro caso, vivimos en un piso en Madrid, de 75 m2 con lo que el kart no podemos tenerlo aquí, así que alquilamos una zona de jaula dónde guardar el kart y la pista para rodar todo el año. Anualmente el alquiler de jaula y pista cuesta 700 euros, pero dado que cobran 15 euros por 10 minutos de un kart de alquiler, el precio nos parece muy asequible, además disponen de dos pistas, una técnica para perfeccionamiento y otra de competición y velocidad.

En definitiva, si podéis y a los niños les gusta, es increíble verlos disfrutar, su cara de felicidad no tiene precio y lo que disfrutan conociendo a niños con sus mismas aficciones compensa todo lo que pagas por el kart y demás accesorios.

Una foto de Iván con su karcito al que llama KITT en honor a su serie favorita "El coche Fantástico" (la nueva no, la de hace 25 años, me ha salido un poco friki :D ).